Aquí va la segunda parte de las enseñanzas bartianas para una vida digna de todo pequeño demonio, que se precie de tal. Estas dos secciones me parecieron las más graciosas. La primera, tiene que ver con una encuesta oficial de Bartolomeo Simpson acerca de dónde vienen los bebés. La segunda, enumera modos de volver locos a los padres (alguno practicado en mi caso, y temido en la actualidad, ahora que me encuentro del otro lado del mostrador...). Vean si no son simpáticos:
¿De dónde vienen los bebés?
Marge: 'eeee... espera a que vuelva tu padre y él te lo explicará'.
Milhouse: 'los hacen los pequeños elfos felicies en el Polo Norte'.
Edna: 'Maridos ineptos se los dan a sus jóvenes ý núbiles secretarias. Los mejores años de mi vida echados en el retrete y ahora juega a papás y mamás con esa bollycao de su secretario. ¿Satisfecho?'
Ralph (el hijo del policía regordete): 'Mis padres me han contado que me eligieron en un catálogo de venta por correspondencia'.
Todd Flanders: 'No estoy seguro, pero puedes irte al infierno por hacerme esa pregunta.
Willie: 'Vuélveme a hacer esta pregunta muchachito, te verás realizando tu pequeña encuesta desde el fondo de un pozo'.
Barney: 'Oh, Dios mío! Estoy embarazado de nuevo?'
Moe: 'No te preocupes, Barney. Haré un hombre de ti'.
Lisa: 'Se que tú eres el resultado de un experimento biogenético que salió mal. Pero mamá y papá me hicieron jurar que guardaría el secreto, así que si se los preguntas, se negarán'.
Kent Brockman: '¿Bebés? Bebés... vamos a ver... hmmm... ¿por qué no le preguntas a aquél estudiante universitario?'
Krusty: 'Debido a la gran cantidad de cartas recibidas por Krusty, sentimos decirte que no puede contestar a tu pregunta. ¡No se pierdan el programa, chicos!
Nelson: 'A juzgar por tu aspecto, yo diría que del zoológico! Joa-Joa!'
Abuelo Simpson: '¿Rabia? Ponte esta cataplasma de mostaza en el pecho en seguida te sentirás mejor'.
Homero: 'Ve a preguntarle a tu madre'.
Cómo Volver Locos a los Padres:
En el Coche:
-No ir al baño antes de salir de viaje.
-Preguntar '¿Ya llegamos?' cada 30 segundos.
-Espera a que estén en un tramo de autopista desolado, y diles que te mueres de hambre.
-Gime.
-Empieza una competición con tu hermanita a ver quién puede chillar con voz más aguda.
-Expresa tu malhumor mediante escupitajos, sollozos, malas caras y aullidos.
En la Iglesia:
-Aplaude el sermón.
-Retuércete.
-Haz garabatos en el misal.
-Cuando pasen la bandeja, róbate unas monedas.
-Impaciéntate.
-Si el sacerdote te mira, sácale la lengua.
-Bosteza.
-Duérmete.
-Ahora, ronca.
-Eructa con fuerza en la homilía.
-Mira fijo a quienes están en el banco posterior al tuyo.
En el Supermercado:
-Mete furtivamente artículos en su carro de compra (latas de conserva, uñas postizas, etc.)
-Di que te has perdido y haz que llamen por los altavoces a tu mamá.
-Haz malabarismos con los huevos más caros.
-Lame la fruta.
-Cómete todo lo que puedas antes de llegar a la caja.
-Exige sentarte en el carrito.
-Saquea las cajas de cereales -y demás- y quédate con los premios.
-Intenta quitar la lata de abajo de la gran pirámide de conservas.
En el Restaurant de Moda:
-Pide un almohadón para tu silla.
-Llama 'garcon' al mozo.
-Átate la servilleta a la cabeza.
-Come con los dedos.
-Pide saludar al chef.
-Come sól unos bocados deja la comida diciendo que te duele la panza.
-Pide que te cambien el agua alegando que no está lo bastante fría.
-Si tus padres no te dejan pedir postres, dales una rabieta.
SIEMPRE:
DILE A TUS PADRES QUE LES QUIERES TANTO, TANTO, QUE NUNCA, NUNCA, TE IRÁS DE TU CASA.
Esos fueron los mejores consejos de Bart (dignos de él mismo, claro)...
Y por cierto, dividir este post en dos partes, fue de las ideas menos cómodas que he tomado en este blog (así que descarto, de aquí en adelante, cualquier corrección en el arte de bloguear).